La reforma energética incluye siete nuevos impuestos y grava con un 6% toda la generación
El Consejo de Ministros ha aprobado un anteproyecto de ley con medidas fiscales para recaudar 2.734 millones de euros y poner fin en 2013 a la generación del déficit de tarifa eléctrica, texto que contempla la creación de siete tasas o impuestos.
Estas medidas incluyen un impuesto general para la venta de electricidad y otros específicos para las energías renovables, como la eólica y la termosolar, los residuos nucleares, la producción hidráulica, el carbón, el gas y los gasóleos para generación eléctrica, entre otros.
En el caso de las energías renovables de régimen especial, no se primará la energía producida por la utilización de un combustible fósil, como por ejemplo la termosolar, cuando en la generación se utilicen fuentes no consumibles y no pueden cobrar primas por esa energía.
No obstante, la biomasa estaría excluida de esta medida, ya que la madera que utiliza proviene de la limpieza de los bosques para prevenir incendios.
También, se aplicará el llamado “céntimo verde” al gas natural para consumo y para generación eléctrica, así como al carbón y al fuel-oil y al gasóleo empleados para la generación de energía eléctrica. Este nuevo gravamen tendrá un impacto de 571,7 millones en las compañías que operan en el régimen ordinario (nuclear, hidráulica, ciclos combinados, carbón, etc.…) y de 688 millones para las de régimen especial (renovable y cogeneración).
El objetivo es lograr ingresos adicionales para hacer desaparecer el déficit y lograr la sostenibilidad del sistema, tanto medioambiental como económica y financiera.
Según cálculos del Gobierno recogidos en la reseña, de no aplicar las medidas recogidas en este anteproyecto, el déficit de tarifa duplicaría el actual en 2015.